Aunque cueste aceptarlo de las cosas más difíciles para mí es perdonar.No soy alguien que se tome a la ligera el término,creo que va más allá del decir te perdono, para mí conlleva que al perdonar superas el daño, sanas la herida y no reprocharás de nuevo la falta.
Para perdonar no se necesita bondad se necesita fortaleza.
No es algo que sucede; es algo que decides y haces cuando sientes la fortaleza suficiente para poder hacerlo.
Perdonar es reparación, te reparas a ti mismo y es el primer paso para reparar la relación interpersonal si es que así lo deseas.
Mario Guerra , un Life & Business Coach define al perdón cómo: “Tú me la debes, pero yo decido que no me la pagues”
A veces no es un tema de perdonar o no, es un tema que no das crédito de lo que esa persona hizo y sigues preguntándote ¿Por qué esa persona hizo lo que hizo?, aquí la cuestión es que nunca darás crédito, todos somos distintos, nunca podrás terminar de entender porque esa persona actuó o dijo lo que te hizo daño. Así que eso sólo es echarle sal a la herida.
El perdón parte de la comprensión y la empatía.
“Antes de que podamos perdonarnos unos a otros, tenemos que entendernos” - Emma Goldman.
Para otorgar el perdón:
Escucha a la persona
Reconoce la importancia para ti de que haya asumido su falta
Di como te sentiste con lo que sucedió
Decide si perdonas o no.
Para pedir el perdón:
Reconoce tu falta
Expresa como te sientes
Reconoce puntualmente como crees que lastimaste a la persona
Ofrece la disculpa y deja claro que no es tu intención volver a lastimarl@
Hay que perdonar para poder seguir, tomate el tiempo que necesites, pero no guardes rencor en tu corazón, eso sólo te dañará a ti; trabajemos en nosotros y seamos siempre mejores.
Mueve tu centro de atención a las cosas buenas y positivas.
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